Jueves, Marzo 28, 2024
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Sobre la fallida propuesta de nuevo Fiscal Nacional: Errar es humano, perdonar es divino, rectificar es de sabios

Diego Palomo es columnista de El Centro, abogado, Doctor en Derecho Procesal y académico de la Universidad de Talca. En este artículo analiza una realidad sin precedentes: por primera vez en la historia la Cámara Alta rechazó una nominación del Presidente para liderar el Ministerio Público.

Hay una frase muy famosa del poeta británico Alexander Pope que señala: “Errar es humano, perdonar es divino, rectificar es de sabios”. Lo que a continuación exponemos léase bajo este punto de entrada.

La designación del próximo Fiscal Nacional es un tema que debería merecer la atención y preocupación de todos los ciudadanos, por cuanto, no existe ninguna encuesta que no sitúe a la seguridad como una de las principales preocupaciones de las personas.

El (sorpresivo) rechazo del candidato propuesto por el Gobierno, Señor Morales, al no alcanzar los votos en el Senado, es una nueva oportunidad de tener a la cabeza de tan importante institución como el Ministerio Público una persona con las competencias profesionales y de liderazgo que el momento impone.

Volver a escuchar a las víctimas y no solo limitarse a oírlas, así como tener la capacidad de implementar estrategias de persecución penal en función de la realidad de cada localidad o zona, aplicando una mirada técnica y regionalista, son sellos de la gestión que el próximo Fiscal Nacional debiese comprometer y asegurar.

Horas de vuelo, un perfil técnico y altas capacidades demostradas de gestión, deben ser avales de que el próximo Fiscal Nacional podrá perseguir de forma eficiente los altos niveles de delincuencia organizada y violenta que afectan a nuestro país. Eso es lo que se requiere hoy más que nunca para el Ministerio Público y para Chile. Capacidades demostradas, y una hoja de ruta clara y sin compromisos opacos.

Somos de regiones. Creemos que el próximo Fiscal Nacional debe venir de regiones y haber desarrollado su carrera en ellas, además de acreditar una capacidad transversal forma de ejercer un cargo como éste. No es posible ni está disponible un Fiscal Nacional “militante”; su única ocupación y preocupación debe estar en recuperar la confianza en el Ministerio Público.

El momento del cambio ha llegado de la mano de un persecutor que posea la experiencia y el conocimiento de cómo funciona el Ministerio Público, conozca la cultura organizacional y tenga el liderazgo – obtenido por el trabajo realizado – para que la Fiscalía asuma los grandes desafíos en materia de delincuencia afectan a todos y todas.

Es cierto que es primera vez en la historia de esta institución que el candidato propuesto es rechazado por el Senado. Pero más allá de centrarnos en las razones que derivaron en un candidato fallido, esto debe ser una tremenda oportunidad para fortalecer las instituciones en general y el Ministerio Público en particular. Nada catastrófico ha sucedido: simplemente las instituciones han funcionado y deben seguir operando dentro del ámbito de sus competencias constitucionales. La Corte Suprema (el pleno) al completar la quina, el Ejecutivo al hacer una nueva propuesta y el Senado al volver a tomar una decisión con toda la seriedad que ella merece.

Ojalá se imponga una decisión fundamentalmente técnica, tanto en el ejecutivo como en el Senado, cuando se deba resolver sobre el segundo candidato que se proponga. Nuestro país lo requiere, Chile lo pide y exige, nuestra sociedad lo agradecerá.
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