El Ministerio de Hacienda oficializó que contratará un seguro ante el Banco Mundial frente a sismos de gran intensidad que causen graves daños estructurales y financieros en el país.
Mediante la Institución de Reconstrucción y Fomento el país recibiría pagos indemnizatorios en el caso de que desastres naturales de este tipo afecten la política fiscal.
La nueva estrategia adoptada frente a los sismos se considerarán en tres niveles: Los eventos de menor costo se financiarán con los fondos del Tesoro Público, los de mediana intensidad serán costeados por los ahorros del Estado, y los de mayor gravedad en esta materia serán financiados con la creación de un fondo para desastres naturales (FODEN).
El Ministro de Hacienda, Mario Marcel señaló sobre la medida: “Estos esfuerzos se enmarcan en una estrategia integral de manejo de riesgos catastróficos estructurada por el Ministerio de Hacienda, la cual incluye la creación del Fondo para Desastres Naturales, en discusión en el Congreso”.
Las autoridades ministeriales declararon que este seguro solo será utilizado en caso de terremotos, y no de otras situaciones como por ejemplo los incendios forestales que afectan al país.
Terremoto de 2010
El terremoto del año 2010 trajo consigo daños financieros que abarcaron casi el 20% del Producto Interno Bruto, sin embargo, hechos como lo sucedido en Turquía han expuesto el enorme daño financiero que las catástrofes naturales pueden producir.
